Graciela Hernández
Exitosa, la reunión de residentes de Tlatelolco y colonias aledañas, que se dio como respuesta al proyecto presentado por los comisionados del GDF y concesionarios del transporte Metrobús. Como en años atrás, retumbaron las voces y derechos de los tlatelolcas, en el auditorio 5 de Mayo de la segunda sección, el 20 de enero pasado.
Sorpresa que nos habíamos llevado como “regalo de año nuevo”, cuando tranquilamente disfrutábamos de un sueño reparador; ¡y en todo el eje de Guerrero se realizaba una despiadada tala de árboles -sanos o enfermos, no hubo distinción, ya que las sierras y personal trabajaron horas extras a la medianoche!
El lema de las presentes autoridades del GDF, en campaña y desde su inicio, fue “La ciudadanía manda”, “Sigamos gobernando juntos”. ¿Dónde quedaron el “mando” y el “juntos”; si lo que hemos visto día con día, es una serie de arbitrariedades y tropelías que desquician a los habitantes? Sólo preguntamos: ¿dónde están esos ingenieros urbanistas, que desde su escritorio hacen planos, a sabiendas que vivimos en una zona sísmica; que éste fue un lago, que sufrimos de un fuerte terremoto en 1985 y muchas estructuras de los edificios no quedaron 100% confiables, amén de las toneladas que aguantan 24 horas al día, por el circular de miles de trailers y todo tipo de vehículos? Esta ciudad sólo implora piedad, y sus habitantes también.
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