Los árboles de Tlatelolco

Foto: Los eucaliptos deben ser talados porque no son apropiados para la unidad, señalaron Fabiola y Oswaldo.

Por Alejandro Castillo

Las palabras fueron cayendo, como las hojas de los arboles. Fabiola y Oswaldo Ingenieros Agrícolas egresados de la UNAM, se tomaron en serio su trabajo, y ante un público heterogéneo, nos hablaron de podas, de plagas, de lo importantes que son los árboles en la función de amortiguar los sonidos y de la fortuna de tener alrededor de13900 de ellos, aproximadamente 92 especies, traídas, (algunas) de sitios distantes como Madagascar o Australia.

En el auditorio escuchaban atentos: tlatelolcas, funcionarios de la Delegación Cuauhtémoc, un anciano periodista jubilado, habitante actual del vecino barrio de Tepito, que se llevó los aplausos más sonoros y sentidos de este evento, después de dejar en la imaginación la belleza y el sentido que tiene el árbol en la vida humana.

Nos acompañó la Directora Territorial de Tlatelolco-Santa María, con su juventud y deseos de trabajar. (Aquí escribo mi enésimo: “ojalá esta vez haya coincidencia entre la realidad y el discurso”).

Con esa inocencia que caracteriza a la gente de buena voluntad, Fabiola y Oswaldo, dejaron en claro que en el caso de la tala por el asunto del Metrobús, el impacto más importante fue social, pues afectaría espacios de estacionamientos de los vecinos tlatelolcas.

En cuanto a podas resaltaron la falta de capacitación de quienes las realizan, convirtiendo esta actividad en una tala.

Un amigo me comentó al término del evento: Los que realizan las podas son trabajadores eventuales que ganan entre 2 mil y 2500 pesos mensuales, ¿cómo van a tener profesionalismo, si no perciben un salario digno ni tienen una mínima seguridad en el empleo?

Las felicitaciones a Oswaldo y Fabiola, que hicieron un trabajo de enorme valía, realizado fundamentalmente, con sus propios medios y una modesta ayuda de este medio informativo.

Gracias por la generosidad de quienes prestaron el auditorio para realizar este evento sin cobrar por ello y gracias a los que con su presencia hicieron posible esta exposición acerca de un asunto tan importante: “La vida de los árboles en la unidad”.