¿Somos iguales ó semejantes?

¿Gemelos idénticos, deveras lo son?

Ing. Héctor Orozco A. (ESIQIE, IPN) E-mail: herectoro46@hotmail.com

¿Las causas de muerte eran antiguamente las mismas que en la actualidad?

La ciencia médica no es preventiva en la mayoría de los casos(quizá solo en las campañas de vacunación), además nosotros colaboramos al no realizarnos al menos una revisión médica exhaustiva al año, sobre todo cuando hemos rebasado los cuarenta años de edad.

Generalmente acudimos al médico cuando enfermamos, esperando que éste alivie nuestras dolencias, lo cual hace gustoso sin buscar los verdaderos problemas de raíz que subyacen en nuestro organismo, ni siquiera emiten un diagnóstico y solo en casos que consideran graves nos ordenan estudios de Laboratorio.

Concluyamos que una “enfermedad” es un proceso que se desarrolla durante un período de tiempo largo, que es prevenible y reversible y que se presenta mediante un cúmulo de síntomas que nuestro organismo exhibe para avisarnos que algo no está funcionando adecuadamente, que la salud es el estado natural del cuerpo humano el cual puede y debe mantenerse durante mucho tiempo, incluso en la ancianidad.

Todo organismo requiere de una cierta cantidad de nutrientes esenciales, pero como no somos iguales (somos semejantes), ésta cantidad es diferente para cada persona. Cuando no le suministramos a nuestro organismo la cantidad necesaria de éstos nutrientes durante un largo tiempo, originamos una “enfermedad”, y he aquí lo interesante de éste proceso, lo único que debemos hacer para revertirlo y sanar es proporcionarle a nuestro cuerpo la cantidad adecuada de dichos nutrientes.

Obviamente cuanto mayor es el daño, necesitaremos mayor tiempo para recuperar nuestra salud, pero a la larga lo conseguiremos.

Así que a nutrirnos bien consumiendo frutas y verduras, pescado, fibra, grasa vegetales, soya, etc., hacer ejercicio (mínimo caminar una hora diario) y descansar mínimo 8 horas al día.

Existen estadísticas que mencionan que la mayoría de fallecimientos antes de la Era Industrial, se debían a infecciones y accidentes, es decir, el ritmo y estilo de vida, el medio ambiente (contaminación), los alimentos, etc., proporcionaban nutrientes en cantidades suficientes y sanas para que nuestros cuerpos se mantuvieran saludables y funcionando con un rendimiento óptimo.

Si actualmente estamos muriendo por enfermedades que tienen que ver con el estilo de vida (diabetes, obesidad, ataque cardiaco, cáncer, accidentes cerebro vasculares, etc.), es lógico suponer que el ritmo de la vida moderna le está robando a nuestros cuerpos los nutrientes vitales que necesita, evitando que los consumamos en las cantidades suficientes y necesarias, sometiéndonos además, cada vez a mayor estrés. En el próximo artículo veremos cuáles son los principales factores y/o elementos que más daño nos están causando.