sábado, 10 de noviembre de 2012

De atracos y otras cosas

Reflexiones desde el insomnio
Por José María Arellano Mora*
Los asaltantes o ladrones menores de edad 
Buscando en internet una tipología de ladrones, encontré varias y algunas muy disparatadas.
Sintetizando, Veamos.

1. Por ocasión. De aquel que al hallarse ante un objeto de valor como: cartera, teléfono móvil, una laptop, llaves, dinero entre libros; objetos que fueron olvidados en un lugar público pero cuyo entorno es cohabitado por personas que frecuentan o son comunes a un sitio; digamos, por lo regular oficina y/o baño.

     La sorpresa, de la persona, al ver los objetos. Al principio sin saber qué hacer, por lo regular, espera el reclamo o solicitud del dueño por el objeto olvidado. ¿Pero qué sucede cuando es una cartera?

2. Por necesidad. De aquellos, que al no tener recursos para solventar gastos de alimentación, deudas o urgencia médica; recurren al ilícito, el robar1. Han existido casos de matrimonios que han planeado y llevado a la práctica el hurto, a una tienda o banco; siempre con tristes resultados.

     2a. Otro tipo de necesidad, es la de conseguir recursos para adquirir droga o pago de la deuda derivado por el consumo de la misma.

3. Medio de vida. Recurso de vida o sobrevivencia. Hace pocos años en la televisión pasaron un reportaje de la detención de un presunto asaltante, y el reportero –el clásico que dice, y mal: “a la afueras”, a mis espaldas”- le espeta: ¿Por qué se dedica al robo?, el presunto, le respondió: Porque es mi trabajo y gracias a Dios tengo trabajo.


De los 3 tipos citados; principalmente los dos últimos, son emanados de la misma sociedad, es decir, un problema de la misma2.

En una tarde de intelectualidad de café, un amigo dijo: ¿Qué sucedería si se manifiesta el tipo 2, en los que ganan el sueldo mínimo?, porque, con ese sueldo no alcanza para nada.

-Bueno, en el caso que decidieran dedicarse a esa actividad, la situación se desbordaría en un conflicto social… un estallido social –contesto un intelectual-revolucionario de café-.

Tomo un sorbo de café y recuerdo que hace 14 años sufrí un atraco y no precisamente en Tlatelolco… En las ya primeras luces del nuevo día, reflexiono y puntualizo:

Entonces, ¿Cuáles serían los factores para una vida social tranquila?.

1.  Seguridad, como servicio público;
2.  Civilidad y participación ciudadana; y
3.  Aplicación de la Ley.

Ciudadano tlatelolca: ¡Cuidémonos, sin caer en la paranoia!.


SUGERENCIAS
Libro
Crimen y castigo. Fedor Dostoivesky, novelista ruso, escrita en 1866

Los ricos también matan. De Jesús Palacios Trigo. Ediciones temas de hoy, S.A, (T.H). Barcelona. España

El padrino. 1969.
El siciliano. 1984.
El último Don. 1996.
Omertà. 2000
Todos ellos de Mario Gianluigi Puzo.
Televisión
La ley y el orden. Serie de género policiaco y legal norteamericano. Dick Wolf, estrenada en 1990. Con 20 temporadas.

Cine
Los olvidados. De Luis Buñuel. México, 1950.

Nosotros los pobres. 1947.
Ustedes los ricos. 1948.
Ismael Rodríguez Ruelas

Un rincón cerca del cielo. 1952.
Ahora soy rico. 1952.
Rogelio A. González.
* Diseñador gráfico.
2 El aumento de pobres no causa una mayor criminalidad: experto. Por Antimio Cruz

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