jueves, 2 de agosto de 2018

Óptica Ciudadana PARA EL RENACIMIENTO VERDADERO

Ø  El 80 por ciento de la población – 96 millones de mexicanos – sufre algún grado de pobreza
Ø  El principal problema - la injusta  distribución de la riqueza-

Por José Luis Hernández Jiménez
En documentos recién publicados a nombre del virtual Presidente electo, abundan, en el primero, ambigüedades, incoherencias y afimaciones no actualizadas y, en el segundo, ocurrencias y ofrecimientos cuyo contenido, en gran parte, está contemplado en las leyes.
Dichos textos, respectivamente, son “50 Propuestas para el renacimiento de México” y “50 Lineamientos para combatir la corrupción”. Ambos tienen, un problema en su premisa básica: que la corrupción es el principal problema del país. Falso. De ahí que, si la premisa es errónea, la conclusión estará equivocada. Por ello insisto:      
Si no se resuelve nuestro principal problema - la injusta  distribución de la riqueza - los mexicanos seguiremos condenados, por los siglos de los siglos, a estar amolados, tercermundistas, pobres. ¿Por qué? Porque además, ella es la causa principal de los otros grandes problemas, pobreza, desempleo, subempleo, bajo poder de compra de los salarios, inseguridad, corrupción, emigración, cosa que en tales escritos, no se dice.  
Vuélvalo a repetir: El 80 por ciento de la población – 96 millones de mexicanos – sufre algún grado de pobreza; Y solo el 20 por ciento - 28 millones - tiene más que resuelto su problema económico. Y en los extremos están, los de muy arriba, 16 multimillonarios en dólares y, los de muy abajo, 9.4 millones de personas que no tienen ni en  qué caerse muertos, o sea, los “pobres extremos”.
Pero en tales textos, se habla de combatir la pobreza, con la misma  receta que ha fracasado desde el siglo pasado – ¡existen 15 mil programas de “desarrollo social”! - , la Asistencia Social, disfrazada de Desarrollo Social. Y del principal problema del país, casi nada dicen. Lo que se pregona es que la corrupción y la inseguridad, etc., etc.   

Informe OXFAM


¿Por qué nada sustancial propone al respecto, el HH candidato ganador? ¿Porque es parte del sistema económico vigente? Después de todo, su compromiso explícito es respetar el actual modelo de desarrollo económico, o sea, seguir la ruta del neoliberalismo. ¿Porque teme al gran capital y a sus principales representantes?: No, pues ya hicieron las paces. ¿Por simple ignorancia? Para eso están sus asesores.         
Por los motivos que se quieran, nada sustancial propone. Por eso, insisto en las siguientes 13 sugerencias que, de concretarse, abonarían al renacimiento verdadero del país. Se trata de cambios para ir construyendo, un México menos desigual:
1. Medimos el crecimiento con el Producto Interno Bruto (PIB), que es la suma de la riqueza que se produce entre todos, en un año.  Sugiero que el propósito nacional, no sea el PIB, sino el BIB, es decir, Bienestar Interno Bruto. Se trataría de crear riqueza para el bienestar de todos los habitantes del país, no solo de crearla por crearla o para que ésta se reparta a ver cómo.    
2. El objetivo del Banco de México,  es lograr el mínimo de inflación. Y lo ha hecho muy bien. La inflación en México es muy baja, comparándola con la que había en los años 70´s y 80´s, o con la que hay en muchos otras naciones. La inflación, hay que recordarlo, es como un indicador del aumento de los precios de mercancías, productos y servicios que se ofrecen en el país. Tenemos pocos aumentos de precios, otra vez, comparándolos con los aumentos de años pasados o de otras naciones. El problema es que en ese gigantesco esfuerzo, se han llevado entre las patas, el no aumento del precio de la principal mercancía, es decir, el precio de la mano de obra, o sea, del salario. Por eso los salarios son bajos y su poder de compra es más bajo aún.
De ahí que, en el mismo sentido que en el punto 1, habría que modificar el principal objetivo del Banco de México, que hoy es el de mantener baja la inflación, por el de garantizar que haya bienestar económico real entre toda la población.  
3. Se requiere una Reforma fiscal mucho más ambiciosa que la recién aprobada; que atienda coherentemente, lo ordenado por el artículo 31 constitucional: Son obligaciones de los mexicanos IV).-“Contribuir para los gastos públicos….de la manera proporcional y equitativa que dispongan las leyes”. Es decir, deben pagar más impuestos los que más ganan, y menos los que menos ganan. Hoy no es así. Para lograrlo es indispensable, hacer realidad los siguientes puntos.   
4. Hay que transparentar la riqueza. La Constitución obliga a los mexicanos, en su artículo 36, “a registrar su propiedad…..en el catastro de la municipalidad…….”. Pero resulta que en el Registro Público de la Propiedad, solo se registran los bienes inmuebles. La otra propiedad, la que no es inmueble, no se registra, es decir, no es pública. La riqueza debe ser públicamente conocida. ¿A qué le temen los que se oponen a ello, sienten vergüenza los ricachones, la clase política encumbrada?
5. La riqueza en México se esconde tras dos parapetos legales – los ilegales son el lavado de dinero y el uso de prestanombres – las S.A. y el Secreto Bancario. ¿Por qué las acciones de una empresa son “anónimas”? Quienes invierten en una empresa no son fantasmas, son personas de carne y hueso, con nombre y apellido. ¿Por qué se esconden en el anonimato? No hay razón ni motivo coherente para hacerlo. Por ello, las acciones de las empresas deben ser nominativas, con el nombre y apellido de sus propietarios, No anónimas. Algo parecido sucede con el “secreto bancario”, que, afortunadamente ya no es tan secreto, pues el SAT bien que sabe.
Si hubiera un Registro Público de la Riqueza (RPR), cualquiera podría hacer las consultas necesarias para conocer la riqueza de quien sea. Si la riqueza  es bien habida, ¿cuál es el problema? En el Congreso se han dado propuestas en este sentido. Pero la mayoría de los legisladores, de todos los Partidos, se han opuesto a aprobar algo así, alegando “seguridad”; “¿Y si los ladrones se enteran?”, se preguntan preocupados. Pues precisamente, digo yo, esa preocupación obligaría a potentados y políticos encumbrados, a hacer algo efectivo contra la delincuencia y la inseguridad pública.         
6. Lo anterior nos debe llevar a introducir en nuestra cultura nacional, la idea de que debe haber límites a la riqueza; no a la riqueza en sí, sino a la gran riqueza. Puede haber millonarios, pero no multimillonarios. Y menos en dólares. En este sentido, una nueva reforma fiscal debe incluir un “impuesto especial a la gran riqueza”, con objetivos precisos, orientados a terminar con los rezagos sociales. Por ejemplo, que a nuestros 16 multimillonarios en dólares, se les cobre un impuesto especial para terminar pronto, con la extrema pobreza.
7. Dos medidas concretas, que no son costosas y que pueden resolver en gran medida el problema del desempleo y del subempleo, son la de establecer la semana laboral  de 40 horas, con pago de 48, en las grandes y medianas empresas y en los gobiernos. Todos los involucrados, y otros más, saldrían ganando con esta medida: Los trabajadores con horario “recortado”, podrían descansar más. Una parte de los desempleados y/o subempleados, podrían ser contratados para suplir las horas vacías y, probablemente, muchas más, para cubrir las llamadas horas extraordinarias o para abrir otros turnos. Las empresas trabajarían más y ganarían más.
8. La otra medida para abatir el desempleo y el subempleo, es el apoyo efectivo a las micro y pequeñas empresas. ¿Por qué a ellas? Porque son las que más trabajadores contratan. El 95 por ciento de los empleos formales en México son gracias a este tipo de empresas. Digamos que existen 12 millones de microempresas y de pequeñas empresas. Si se les da un apoyo especial, para que puedan contratar cada una de ellas, a un trabajador adicional, habría pronto, 12 millones de empleos formales más.
9. En este esfuerzo  para combatir con eficacia el principal problema del país, también hay que combatir el bajo poder de compra de los salarios. ¿Cómo? Para empezar, adoptando como meta del país, a corto plazo, el cumplimiento de lo que dice al respecto la fracción VI del apartado A del artículo 123 Constitucional: Los Salarios Mínimos Generales, deberán ser SUFICIENTES (no “remuneradores” como promete AMLO), para satisfacer las necesidades de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos.
Si hoy se cumpliera dicho precepto, el monto del salario mínimo general, debería ser del orden de los 600 pesos por jornada laboral, y no los 88 vigentes. Pegado con esto, es de acatamiento inmediato la máxima de “a trabajo igual, corresponde salario igual”. Es decir, parejo para todos y todas. Hoy no se cumple en gran medida, con las mujeres.                        
10. Debe desaparecer la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (CNSM). Dicha Comisión es un elefante blanco que nos sale carísimo, porque sus integrantes no cobran un salario mínimo sino mucho más (150 mil pesos gana, al mes, el Presidente de la CNSM). Su trabajo principal, consiste en realizar estudios sobre el salario. Pero esta labor también la llevan al cabo el INEGI y el CONEVAL. Y su otra única función principal, la fijación de los montos de los Salarios Mínimos Generales y Profesionales, la puede realizar la Cámara de Diputados.
Y que de paso aprueben una Ley o Catálogo de Salarios Máximos. Así como hay Salarios Mínimos, que haya Salarios Máximos, para ambos bandos, el público y el privado. Hoy existen Presidentes Municipales que ganan más que don Enrique Peña Nieto.
11.- Nuestra democracia debe abaratarse, reformando el inciso A, de la fracción II del artículo 41 constitucional: Es decir, la base para el reparto del apoyo económico a los Partidos no debe ser el padrón electoral sino los votos efectivos, multiplicados por el 35 por ciento (No el 65 %) del Salario Mínimo General más alto. En lugar de gastar, como este año, 28 mil millones de pesos en el proceso electoral, que solo se gasten 8 mil millones. Por ejemplo, que a los Partidos se les asignen 2 mil millones de pesos, en lugar de los 12 mil que les dieron este, electoral, año. Y los 20 mil millones sobrantes bien alcanzarían para apoyar efectivamente a las microempresas.
Con la actual formula, en 2019, a los Partidos se les destinarán (aun quitando a dos que pierden el registro) ¡4,710 millones de pesos!, distribuidos de la siguiente manera: Morena 1,567; PAN 867; PRI 798; PRD 397; Verde 375; MC 362; y PT 344. O sea, la misma gata pero revolcada, pues ahora el gañón de los miles de millones a repartir será el Morena y uno de los patitos feos y pobres, el PRI. Aún si el Morena, devuelve, como han declarado sus voceros, la mitad de lo que “le toca”, el problema de fondo no se resuelve. Urge cambiar la mentada formula.    
12.- No se debe derogar la Reforma Educativa. Lo que procede es partir de ella para hacer una Revolución Educativa. ¿Cómo? Invirtiendo al menos, el 8 por ciento del PIB en este rubro, que es el gasto promedio en educación, de los socios de México en la Organización de Cooperación para el Desarrollo Económico (OCDE). Hoy gastamos apenas el 5.7 % del PIB y el 62 por ciento está dedicado a salarios (el promedio dedicado a salarios, en la OCDE es del 40 %). ¿De qué otra manera? Invirtiendo, al menos el 2.4 por ciento del PIB en Investigación y Desarrollo, que igual, este es el promedio de lo que se gasta en la OCDE. Hoy en México, se gasta apenas el 0.45 % del PIB, en dicho rubro.        
13.- Se debe firmar un Pacto contra la Inseguridad, la impunidad y Por un Medio Ambiente Sano. ¿Quién lo debe signar? Todos los actores políticos, sociales y económicos del país: Los tres Poderes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) en sus tres niveles: federal, estatal y municipal; los empresarios, los medios de comunicación electrónicos e impresos, las iglesias, las instituciones autónomas, las organizaciones gremiales (sindicatos, federaciones, confederaciones, de trabajadores de las ciudades y del campo), Asociaciones de la sociedad civil como de Padres de Familia, de Profesionistas, de Deportistas, Ecologistas, de Derechos Humanos. Así, todos los entes organizados, a prevenir los delitos, a denunciar los que se cometan, a exigir que se castiguen como ordena la ley, a supervisar que así se haga. Y a cuidar la naturaleza. 
He dicho     
Ahí están mis propuestas para atacar frontalmente, al real peligro para México, y que es el principal problema del país, la injusta distribución de la riqueza, causa de los principales males del país y anexas. A ver si el HH Presidente casi electo, o alguno de sus contlapaches cercanos, se anima a retomarlas. O a ver si no se enojan porque le enmiendo la plana al líder mayor. ¿O cómo la ven, estimados cuatro o cinco lectores?              
Notitas: Una.- Que no agradó el contenido de la carta que AMLO mandó al Trump. ¿Cómo está eso de que somos iguales pues “ambos sabemos cumplir nuestras promesas (¡construir el muro fronterizo, satanizar y expulsar a los mexicanos de EU, acabar con el TLC,…!)…?” Dos.- Que tampoco gustó que don Peje haya amenazado con su “¿cómo se atreven (los del INE) a denunciar (lo del posible lavado de dinero del Fideicomiso de su Morena, con el pretexto de apoyar a los damnificados del 19 de septiembre)?” Y “acuérdense que yo no odio pero no óvido” No está bien que eso diga el próximo Presidente Constitucional. Digo. Tres.- Que ídem: despedir a 276 mil trabajadores “de confianza” de la burocracia federal ¿no es fomentar el desempleo? Bajar el salario de miles de ellos ¿no va contra la ley laboral? ¿No irá a salir más caro el caldo que las albóndigas? De lo que se trata es que haya más empleos y de que los salarios bajos, aumenten, no al revés volteado. Cuatro.- Que ¿va a consulta popular la construcción del Nuevo Aeropuerto? ¿No será una pantalla para ocultar una decisión ya tomada de antemano, en el sentido de cancelar la actual construcción? ¿Y los miles de millones de pesos gastados en la construcción de la obra, se irán a la basura? Insisto: el Aeropuerto debe salir de la CDMX, porque es un foco de contaminación ambiental, un peligro latente de que ocurran accidentes y la causa de la sordera de miles de vecinos. Cinco.- Que vale la pena releer, el discurso del Ché Guevara en Punta de Este, Uruguay, en 1961, durante la Reunión del Consejo Interamericano Económico Social, a propósito de la iniciativa de EU de promover una “Alianza para el Progreso”, ahora que nuestro flamante y virtual Presidente electo, la quiere revivir con su cuatacho Trump. Y también lean mi libro, “Cuando correteábamos utopías”, ¿va? Seis.-  Que este servidor tiene el hábito de hacer ejercicio diario, combinando el Tai Chi, el Kung Fu, el Chikung y el Atletismo en su modalidad de carreras de fondo. Con esta mala costumbre tiro la polilla constantemente y me ahorro gastos médicos. ¿Y ustedes cuándo, estimadas y estimados? Si quieren les enseño. ¡Anímensen!
Correo E   hernandez-jimenez2012@hotmail.com           
México, CdMx, a 26 de julio del 2018. 



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