viernes, 5 de noviembre de 2010

¡QUE PENA!

Por María Eugenia Arellano


La sociedad sometida, indiferente y desorganizada por desencanto y cansancio al no ser escuchada ni atendida, es la base donde se construyen los malos gobiernos alimentados por la corrupción, el nepotismo y la simulación, un ejemplo de esto, lo pudimos observar en las recientes elecciones vecinales.

Promotores de la Delegación Cuauhtémoc, Red Ángel del Gobierno del Distrito Federal, ex jefe delegacional, ex diputados y servidores públicos, induciendo la formación de planillas “a modo” de unos y otros en una lucha inequitativa para quienes verdaderamente querían competir sin patrocinio.

Lo anterior en una disputa por el control para que todo siga siendo igual, manipulación, deficiencia en los servicios públicos, anarquía, delincuencia y malos manejos de los recursos públicos en perjuicio de toda la ciudadanía.

El remedio: educación, ciudadanización y participación.

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