Alejandro Mario Fonseca
Hace ya algunas décadas, cuando yo
era niño (si esto lo estuviera diciendo en clase mis alumnos dirían todos a
coro uuuuuuuyyyyyyyy), leía las tiras cómicas del periódico Excélsior. Eran una verdadera delicia,
“El príncipe valiente”, Fantomas, Rolando Rabioso, el Sargento Chiricuto,…
Ya más grandecito no sólo leía las
tiras cómicas (caricaturas como les llamábamos los niños) sino también las
noticias y las columnas de análisis político. Eran los años gloriosos del Excélsior, dirigido por Don Julio
Scherer.
Mi papá lo leía completito, se
tardaba más o menos dos horas después del desayuno. Se trata de un rito
familiar que ahora yo repito al pie de la letra. Claro que ahora ya no compro
el Excélsior, sino el diario Reforma.
¿Por qué? La historia es larga, pero
le cuento lo esencial. El presidente Echeverría se apropió del diario (Excélsior era una cooperativa) y
expulsó a Don Julio y sus colaboradores. Así fue como nació la Revista Proceso y subsecuentemente los diarios Uno Más Uno, y La Jornada; después
vendría el Reforma.
AMLO con el Grupo Milenio |
El Grupo
Imagen
El diario Excélsior inició una tradición liberal del trabajo periodístico,
que gracias a Dios se mantiene viva, no por el Excélsior, sino por sus
sucedáneos. Confieso que fui lector del Uno
Más Uno y también de La Jornada, pero
se fueron ideologizando hacia un izquierdismo barato. Grandes periodistas como
Granados Chapa, Vicente Leñero y otros transitaron hacia lo que hoy es el
diario Reforma.
Hoy en día el Excélsior está controlado por el Grupo Imagen, un
conglomerado de empresas mexicanas de medios de comunicación que pertenece
al Grupo Empresarial Ángeles.
Se hace destacar por sus contenidos de
noticias los cuales pone a disposición en México a través de Periódico
(Excélsior), Radio (Imagen Radio), Televisión (Excélsior tv), e Imagen
Digital.
En televisión abierta, es propietaria
de la cadena nacional de televisión comercial, Imagen Televisión y
anteriormente produjo el canal cadenatres, también de televisión abierta.
En las mañanas, mientras desayunamos
escuchamos en casa las noticias de Radio Imagen (en 105.1 de FM) a cargo de
Pascal Beltrán del Rio. Aunque cargado hacia el punto de vista de sus
patrocinadores de derecha, banqueros y casas de cambio, es un buen noticiario
que intenta ser objetivo.
El grupo
Milenio
Le cuento todo esto porque hace un
año, tal vez un año y medio, me encontré un domingo en la mañana sin nada que
leer. O me desperté tarde, o el diario Reforma
no llegó a Cholula, o se vendió muy rápido; no sé qué fue lo que pasó, el caso
es que me vi obligado a comprar el
Milenio.
Estaban a la venta ese, El Sol de Puebla, y algunos pasquines
poblanos. Yo sabía que en el Milenio escribían
algunos farsantes como Joaquín López Dóriga (el pseudo filósofo de Televisa). Pero bueno, de eso a nada, pues lo
compré. Y vicioso de mí, lo leí completito.
El origen del diario Milenio es
regiomontano, en la actualidad, según las malas lenguas, es propiedad de Carlos
Salinas de Gortari. Hacia 2008, se lanzó al aire el proyecto Milenio
Televisión, incursionando para la OEM, además de contar con un portal
informativo en Internet y con estación de Radio en Monterrey, Ciudad
de México, Guadalajara, Puebla y Torreón (Laguna).
En las elecciones federales en
México de 2012, el candidato izquierdista Andrés Manuel López
Obrador dijo que Milenio estaba apoyando a su
competidor Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario
Institucional. El día posterior a la elección presidencial, el periodista y
director editorial adjunto de Grupo Milenio en aquel
entonces, Ciro Gómez Leyva, se disculpó por la inexactitud de las
mediciones presentadas.
AMLO se
enfrenta con Milenio
Dicho lo anterior, regreso a mi tema,
aquel domingo en la mañana en el que me tuve que zampar el Milenio, sentí que había
perdido mi tiempo. Recuerdo tan sólo dos columnas, y eso porque a ambos
comentaristas los conocí en la BUAP, la de Enrique Condés Lara, que hablaba del
hijo de Maximiliano, y la de Luis Lozada León, que criticaba a AMLO.
Y ahora resulta que este domingo (25/3/18) me
encuentro con que la noticia de la semana pasada fue que AMLO se enfrentó
exitosamente con Milenio TV. A
continuación reproduzco partes del debate tomadas de la columna de Álvaro
Cueva:
Me encantó
ver a AMLO en Milenio TV. Porque por
más que lo quisieron sacar de sus casillas, jamás perdió ni el estilo ni la
congruencia ni ese personaje tan fascinante que ha estado construyendo en los
últimos años.
Entre más se
atacaba-cuestionaba a López Obrador,
mejor le iba. “No somos enemigos no somos delincuentes”. Don Andrés Manuel
habló de eso. ¿Estuvo mal? ¡Claro que no!
“Si queremos
una educación de calidad lo primero que tenemos que hacer es proteger a los
maestros, no convertirlos en los enemigos políticos número uno ni quitarles sus
derechos”.
Que si se
van a detener las obras de la administración anterior, que si se va a meter al
gobernante en turno a la cárcel, que si el aborto, que si los matrimonios
igualitarios.
¡Puros
lugares comunes! Lo que se pregunta en todas las campañas y que a la hora de
los trancazos no recibe un seguimiento así de personal, así de riguroso, así de
“comprometido”.
La conclusión del columnista Cueva es
la de un candidato triunfador: la de un espectáculo de reforzamiento y
demostración de poder.
No sé usted, pero yo amable lector
veo muy sospechoso que un diario como Mileno
esté lanzando las campanas al vuelo por un candidato de izquierda cuando
todavía faltan 100 días para las elecciones. ¿O será que de verdad a AMLO ya no
lo paran con nada?
No hay comentarios:
Publicar un comentario